el mundo por moño

Con las sequías que hemos venido padeciendo en los pasados años y las llamadas al ahorro por parte de las autoridades, había llegado a tener la sensación de que la ducha diaria era un derroche y además empezaba a tener el sentimiento de no ser una buena ciudadana.

Los fines de semana y las vacaciones las paso en un pueblo en el que casi no hay ganadería pero si mucha agricultura y naturalmente de regadío.

El verano pasado se llamó reiteradamente a los ciudadanos al ahorro de agua y se nos amenazó con racionarlo y ponerlo al mismo precio que el caviar ruso. Pero pude observar que el agua destinado al riego en la agricultura debe de ser muy abundante, pues había cultivos que se regaban durante toda la noche y parte del día y lo que en realidad me resultaba sangrante era que a la par que el cultivo también se regaba el camino enfangándolo como si hubiera llovido y no he oído a ninguna autoridad llamar al orden a los agricultores y muchísimo menos amenazarlos con subir el precio y rebajar la cantidad.

Entiendo que los cultivos se han diversificado y que de secano sólo queda el cereal, pero eso no justifica que parte de un colectivo derroche el agua.

De los campos de golf no quiero decir nada porque tengo la sensación que con la cantidad de campos que se están haciendo y algunos en sitios que son auténticos eriales, los españoles teníamos traumas tan grandes por falta de dichos campos que seguramente las autoridades han considerado que nos sale más barato el agua que ir al psicólogo a que nos cure el trauma.

Dice mi propio que según las estadísticas el 20% del agua se destina a usos domésticos, el 70% lo consume la agricultura y un 10% se pierde en las conducciones. ¿Los campos de golf , en que están incluidos? ¿Y qué me dices de las piscinas privadas?

En consecuencia he decidido que en vez de ducharme voy a poner un campo de golf en mi patio (o una piscina), que al parecer no malgasta agua. Así me consideraré, y considerarán, buena ciudadana.